Hoy en día resulta un tanto chocante para la vista observar la simpleza de las bicicletas, el vestuario colorido y chillón que la mayoría de nosotros llevábamos, y, sobre todo, la técnica que emplean (es que la bici no da para mucho más...).
Amortiguadores que en los casos más extremos llegaban a los 90 mm. (para descenso burro, nada de DH o Freeride). El mountain bike era mountain bike, sin subdivisiones ni estilos. Sufrir subiendo una montaña para luego disfrutar bajándola. La suspensión integral era un lujo que comenzaba a aparecer tímidamente pero que no pasaba de unos elastómeros un tanto cutres. Observad en el vídeo cómo bajan (y las piñas que se meten), en la mayoría de los casos con una bici rígida o con un amortiguador de 6 a 8 cm. de recorrido. ¡¡En un campeonato de descenso con bicis totalmente rígidas!!. Los cascos sin visera y raramente alguien con protecciones en codos y rodillas, algunas de ellas seguro que de portero de fútbol (bueno, hay uno que sale con unas Dainese de la época, pero sería un potentado). Observad también como algunos llevan calapiés, y como equipaje, los hay que bajan con la parte de arriba de chandal. Zapatillas J'Hayber y lenticulares que estaban de moda por aquel entonces... Algunos de los cascos parecen verdaderas cestas para pinzas de la ropa...
En definitiva, una época de la que me siento orgulloso haber vivido y que demuestra la evolución que ha sufrido este mundillo. Ahora nos vemos frente a bicicletones con frenos de disco hidráulicos sobredimensionados de hasta incluso 8 bombines, cuadros que rozan la perfección con geometrías milimétricamente estudiadas y en cualquier material (fibra de carbono, aluminio y, ¿qué ha sido del titanio?), suspensiones inteligentes (brain de Specialized con precargas positivas y negativas, VPP de Santa Cruz o Intense...), 29 velocidades que nos brindan las enduro frente a las 21 de entonces, competencia de SRAM frente a la que en los 90 fue monopolista, la todopoderosa Shimano, amortiguadores a los que puedes regular el rebote, recorrido y dureza, que llegan a los 300 mm. en el caso del freeride extremo... Auténtica I+D volcada al mundo del mountain bike. Se nota que estamos frente a la gallina de los huevos de oro.
Hoy en día, para comprarte una bici en condiciones, además de dinero (es un deporte caro), debes tener en cuenta qué pretendes hacer con ella: Enduro, XC, Freeride, DH, Dual, Ciclocross, BMX..., para acertar en la elección. Apoyo tajantemente la evolución, pero no puedo dejar de pensar en los buenos momentos que me ha dado mi Orbea Winner, y en todo lo que ha aguantado (y la pasta que me he gastado, jejeje).
Nuevos tiempos y nuevas bicis, pero misma penya y misma ideología. Con que mañana disfrutemos como lo hacíamos antes, me consideraré más que satisfecho.

ROTE OR DIE.