RAFA, "EL KALIFA"
En este mundillo donde del ocio al negocio no hay más que tres letras de separación, hay de todo. Bueno y malo. Mejor y peor. Os invitamos a charlar un rato sobre un aspecto fundamental del ciclismo de montaña: las personas que engrandecen este deporte.
Desde que los americanos neohippies se echufaran un canuto y luego los rastrales de aquellas viejas clunker pista abajo hasta hoy, ha llovido mucho. Quizá no todo lo que quisiéramos para conseguir que las explosivas bajadas de La Mola tengan el agarre justo para "tirarle" con gracia, si es que se tiene; pero sí lo suficiente como para no exagerar un ápice, al afirmar que esta película de bicis y montañas, ha corrido muyyyy deprisa en todo ese tiempo.
¡¡Menudos mocosos imberbes éramos muchos en los 90!!, allá que salíamos al campo a dar pedales con verdaderos hierros andantes. Volviendo la vista atrás, muchos somos los que quedamos aún pululando infatigablemente por estas montañas, pensando que incluso podemos ser una especie de reliquia del Paleozoico o del Cuaternario ciclista. Lo mismo incluso nos flipamos de más, y nos creemos herederos directos de aquellos neohippies apellidados Murray, Fisher o Ritchey, pero empadronados en esta tierra áspera que fita con el Mediterráneo.
Sin embargo, el flipe se tornará asombro y la sonrisa se nos dibujará de repente en la cara al ver y recordar la verdadera historia de los pioneros de la Terreta, escrita fundamentalmente por un personaje, ilustre donde los haya, que ha puesto nombre propio a este deporte desde allá donde el Vinalopó brota de una cueva mariolera, hasta donde perezosamente desaparece en un entorno de palmeras. Nos referimos cómo no, a Rafa "el Kalifa".
El asombro vendrá al ver que cuando tú dabas tus primeras cíclicas pedaladas con sonido de tierra bajo unas gomas gordas en tus ruedas, él ya venía buscando barrancadas, senderos y retos nuevos entre estos horizontes. Cuando tú lidiabas con un acero con medidas propias de un cuadro de carretera él ya poseía una bicicleta "de revista". Cuando Camelbak sacó el modelo "Mule", el Kalifa ya llevaba su "Kalifabac". Cuando tú piensas en un rutón en las profundidades de Cazola, él ya lo cató hace 15 años. Cuando tú alcanzabas a ubicar la senda del Contador del Sit, él ya volvía de las bajadas de Rabosa. Cuando tú "descubrías" un nuevo sendero, ya existía otro con su nombre. Y es que, poca gente tiene la capacidad de absorber el terreno y convertirlo en mapa mental como él. No ahora, sino desde ya un lejano... 1989.
La sonrisa de tu pensamiento al ver que eres un simple activista del pedal, a la sombra del pionero, se te dibujará al pensar en su gran y enérgico vozarrón. También al venirte a la mente la chistosidad contínua de sus comentarios, su tono alegre, jovial, cercano; y cómo no, al comprobar su carácter casi paternal a la hora de ofrecerlo todo encima de la bici, y fuera de ella.
Los roteros nos hemos cruzado en su camino unas cuantas veces. Muchas más en los inicios del mountain bike en Novelda, y menos en estos últimos años, bien es verdad. Pero también lo es, que pararse a charlar con él bien sea en el supermercado de la esquina o en las calles de Riópar, nunca ha sido un acto indiferente, que siempre termina de igual forma cuando lo ves: con una carcajada garantizada por despedida.
En una da las grandes embarcadas por la Terreta tuvimos la suerte de tenerlo entre nosotros. Un par de guarrazos en apenas unos metros de dura trialera no le impidieron seguir con la coña que le caracteriza; como tampoco tener que abortar la ruta en mitad de la nada, es más, la resignación de no poder terminar la aventura terminó en un prodigioso solomillo y un "kilo i mig de faves" encima de la mesa, regado con un buen tanque de cerveza, gracias a su poder de organización y su innata capacidad para convertir un mal momento, en uno muy grande.
Por esa personalidad propia de los pioneros, y por ese estilo encima de la bicicleta, desde estas míseras pero sinceras palabras, los roteros en masa pedimos la nominación del Kalifa para pertenecer... al "Mountain Bike Hall of Fame"!!!!
Sin duda, leyenda viva de la bici de montaña en el Vinalopó, y fuera de él.
Desde que los americanos neohippies se echufaran un canuto y luego los rastrales de aquellas viejas clunker pista abajo hasta hoy, ha llovido mucho. Quizá no todo lo que quisiéramos para conseguir que las explosivas bajadas de La Mola tengan el agarre justo para "tirarle" con gracia, si es que se tiene; pero sí lo suficiente como para no exagerar un ápice, al afirmar que esta película de bicis y montañas, ha corrido muyyyy deprisa en todo ese tiempo.
¡¡Menudos mocosos imberbes éramos muchos en los 90!!, allá que salíamos al campo a dar pedales con verdaderos hierros andantes. Volviendo la vista atrás, muchos somos los que quedamos aún pululando infatigablemente por estas montañas, pensando que incluso podemos ser una especie de reliquia del Paleozoico o del Cuaternario ciclista. Lo mismo incluso nos flipamos de más, y nos creemos herederos directos de aquellos neohippies apellidados Murray, Fisher o Ritchey, pero empadronados en esta tierra áspera que fita con el Mediterráneo.
Sin embargo, el flipe se tornará asombro y la sonrisa se nos dibujará de repente en la cara al ver y recordar la verdadera historia de los pioneros de la Terreta, escrita fundamentalmente por un personaje, ilustre donde los haya, que ha puesto nombre propio a este deporte desde allá donde el Vinalopó brota de una cueva mariolera, hasta donde perezosamente desaparece en un entorno de palmeras. Nos referimos cómo no, a Rafa "el Kalifa".
El asombro vendrá al ver que cuando tú dabas tus primeras cíclicas pedaladas con sonido de tierra bajo unas gomas gordas en tus ruedas, él ya venía buscando barrancadas, senderos y retos nuevos entre estos horizontes. Cuando tú lidiabas con un acero con medidas propias de un cuadro de carretera él ya poseía una bicicleta "de revista". Cuando Camelbak sacó el modelo "Mule", el Kalifa ya llevaba su "Kalifabac". Cuando tú piensas en un rutón en las profundidades de Cazola, él ya lo cató hace 15 años. Cuando tú alcanzabas a ubicar la senda del Contador del Sit, él ya volvía de las bajadas de Rabosa. Cuando tú "descubrías" un nuevo sendero, ya existía otro con su nombre. Y es que, poca gente tiene la capacidad de absorber el terreno y convertirlo en mapa mental como él. No ahora, sino desde ya un lejano... 1989.
La sonrisa de tu pensamiento al ver que eres un simple activista del pedal, a la sombra del pionero, se te dibujará al pensar en su gran y enérgico vozarrón. También al venirte a la mente la chistosidad contínua de sus comentarios, su tono alegre, jovial, cercano; y cómo no, al comprobar su carácter casi paternal a la hora de ofrecerlo todo encima de la bici, y fuera de ella.
Los roteros nos hemos cruzado en su camino unas cuantas veces. Muchas más en los inicios del mountain bike en Novelda, y menos en estos últimos años, bien es verdad. Pero también lo es, que pararse a charlar con él bien sea en el supermercado de la esquina o en las calles de Riópar, nunca ha sido un acto indiferente, que siempre termina de igual forma cuando lo ves: con una carcajada garantizada por despedida.
En una da las grandes embarcadas por la Terreta tuvimos la suerte de tenerlo entre nosotros. Un par de guarrazos en apenas unos metros de dura trialera no le impidieron seguir con la coña que le caracteriza; como tampoco tener que abortar la ruta en mitad de la nada, es más, la resignación de no poder terminar la aventura terminó en un prodigioso solomillo y un "kilo i mig de faves" encima de la mesa, regado con un buen tanque de cerveza, gracias a su poder de organización y su innata capacidad para convertir un mal momento, en uno muy grande.
Por esa personalidad propia de los pioneros, y por ese estilo encima de la bicicleta, desde estas míseras pero sinceras palabras, los roteros en masa pedimos la nominación del Kalifa para pertenecer... al "Mountain Bike Hall of Fame"!!!!
Sin duda, leyenda viva de la bici de montaña en el Vinalopó, y fuera de él.
Activista del pedal.... me gusta
ResponderEliminarYeah !!!!
ResponderEliminarA vueltas andaba yo con esta entrada, tributo innegociable para este Visionario Vinalopero.
OPA Kalifa !!
Pepe, este visionario da para más de una entrada, TIRA-LI!!!
ResponderEliminarGrandisimas palabras para una grandisima persona y amigo!!!.
ResponderEliminarSin duda alguna, el pater familias del enduro noveldero, y una máquina incansable dando pedales.
ResponderEliminarColoco AQUÍ la entrada con las fotos de la rotada que hicimos con él por el Ponoig y Finestrat, que se tuvo que abortar pero terminó con final feliz a modo de carne de buey a la piedra y demás viandas.
UN CRACK!!
Con tu permiso, secre, he editado la entrada para colocar el link de las fotos cuando nombras la rotada por la Terreta.
ResponderEliminarFaltaría más Josele.
ResponderEliminarRafa, activismo rulZ!
ResponderEliminarGran entrada Secre, como grande es su protagonista.
ResponderEliminarLarga vida al Kalifa por las sendas de la Terreta.
Un abraç Rafa.
Colosal como biker y como persona. Las veces que he coincidido con él se guardan a fuego en mi memoria.
ResponderEliminarRiba, riba Kalifa!!!;)
Gracias compañeros de rotada,no esperaba este reconocimiento,pero al final los bikers que salen a divertirse sin pensar ser los primeros en llegar,si no llegar para disfrutar de las birras y las tapas y comentar las chorradas de la ruta no esperaba menos de vosotros,espero recuperarme pronto ya llevo tiempo sin sin ponerme puntos y el betadine se caduco antes me lo hacia doblado,gracias por lo que otros no se han acordado..
ResponderEliminarun abrazo
D F V
ResponderEliminarA tí, Rafa !!!!!!!!
ResponderEliminarAúpa Kalifa!
ResponderEliminarA la que puedas te unes a una rotada!