LA SENDA
Ella se encarga de que no me extravíe, de que pueda disfrutar del paisaje que me rodea y respirar profundo mientras voy llegando a mi objetivo. Unas veces es mansa, otras salvaje, pero de cualquiera de las formas en las que me la encuentro, hace que mi corazón palpite a un ritmo frenético, ya sea subiendo o bajando. Un grito de alegría incontenible suele escucharse en el grupo mientras bajamos...
Cualquier época del año es buena, pues ella ahí está, donde la dejamos la última vez, impasible, grandiosa, taciturna... Tan sólo cambia todo aquello que la rodea: en otoño, el típico color marrón entristecido y olor a húmedo que prepara para el frío que nunca llega a convertirse en blanca nieve, mientras que en primavera, jubilosa explosión de colores y vida por todas partes, que alegra el espíritu de quien la recorre.
En multitud de ocasiones permanece oculta a la vista, escondida bajo la complicidad de unos pinos misteriosos y es motivo de júbilo y gran alboroto cuando es descubierta; pierde su virginidad pero pasa a ser adorada por todo el grupo. Es la encargada de mantener la diversión con sus contínuos entresijos, sus escalones, sus rocas estratégicamente colocadas por el paso del tiempo, que suponen todo un reto para el biker que intenta en todo momento controlar la situación, comprendiendo la simbiosis en la que se encuentra con respecto al entorno que le envuelve y de la que ha de sentirse protagonista, cuyo respeto inculcado desde crío que merece la madre naturaleza ha de mantener intacto...
Ella siempre está dispuesta a hacer que el biker, a principios de semana, sienta la necesidad de satisfacer un inevitable síndrome de abstinencia, pues la sensación de libertad, de intensa velocidad, de júbilo desenfrenado, corre irremediablemente por sus venas. Pero ojo, hay una cara oculta, que no agrada tanto, y es que cuando se la subestima, las consecuencias pueden ser catastróficas: la humedad de la mañana, una pequeña llovizna horas antes o la importuna neblina pueden hacer de las raíces, piedras y rocas, trampas mortales para el incauto. El resultado es impredecible. Pero el motivo bien lo merece.
Así pues, desde aquí pretendo hacerle un pequeño homenaje, ella que está en todos los lados, menos entre el asfalto y el hormigón, siempre rodeado de ruidos y prisas; está y forma parte de mi segundo hogar, al que voy con mi bicicleta todos los sábados junto con los amigos, mis amigos. Pocas cosas son comparables al placer que se siente enmedio de un almuerzo en el monte, compartiendo risas, bocatas y vino, cobijados del sol bajo una buena sombra en verano o del frío intenso en invierno. Por tanto, por ello y para ello, cuidaré de ella siempre que pueda, y la respetaré, intentando inculcar mis ideas al resto de la gente, y sólo cuando todos pensemos una misma idea, estaremos en disposición de reclamarla como nuestra, puesto que así es como ella quiere sentirse.
Espero poder seguir disfrutando de ella y que los hijos de mis hijos la vean y la cuiden como yo lo hice durante toda mi vida.
Reclamemos a quienes desde sus despachos, que a golpe de bolígrafo y respaldados por una infundada burocracia intentan impedir que este ciclo tan maravilloso se repita un sábado de cada semana, nuestro derecho a disfrutar de ella: LA SENDA.
En multitud de ocasiones permanece oculta a la vista, escondida bajo la complicidad de unos pinos misteriosos y es motivo de júbilo y gran alboroto cuando es descubierta; pierde su virginidad pero pasa a ser adorada por todo el grupo. Es la encargada de mantener la diversión con sus contínuos entresijos, sus escalones, sus rocas estratégicamente colocadas por el paso del tiempo, que suponen todo un reto para el biker que intenta en todo momento controlar la situación, comprendiendo la simbiosis en la que se encuentra con respecto al entorno que le envuelve y de la que ha de sentirse protagonista, cuyo respeto inculcado desde crío que merece la madre naturaleza ha de mantener intacto...
Ella siempre está dispuesta a hacer que el biker, a principios de semana, sienta la necesidad de satisfacer un inevitable síndrome de abstinencia, pues la sensación de libertad, de intensa velocidad, de júbilo desenfrenado, corre irremediablemente por sus venas. Pero ojo, hay una cara oculta, que no agrada tanto, y es que cuando se la subestima, las consecuencias pueden ser catastróficas: la humedad de la mañana, una pequeña llovizna horas antes o la importuna neblina pueden hacer de las raíces, piedras y rocas, trampas mortales para el incauto. El resultado es impredecible. Pero el motivo bien lo merece.
Así pues, desde aquí pretendo hacerle un pequeño homenaje, ella que está en todos los lados, menos entre el asfalto y el hormigón, siempre rodeado de ruidos y prisas; está y forma parte de mi segundo hogar, al que voy con mi bicicleta todos los sábados junto con los amigos, mis amigos. Pocas cosas son comparables al placer que se siente enmedio de un almuerzo en el monte, compartiendo risas, bocatas y vino, cobijados del sol bajo una buena sombra en verano o del frío intenso en invierno. Por tanto, por ello y para ello, cuidaré de ella siempre que pueda, y la respetaré, intentando inculcar mis ideas al resto de la gente, y sólo cuando todos pensemos una misma idea, estaremos en disposición de reclamarla como nuestra, puesto que así es como ella quiere sentirse.
Espero poder seguir disfrutando de ella y que los hijos de mis hijos la vean y la cuiden como yo lo hice durante toda mi vida.
Reclamemos a quienes desde sus despachos, que a golpe de bolígrafo y respaldados por una infundada burocracia intentan impedir que este ciclo tan maravilloso se repita un sábado de cada semana, nuestro derecho a disfrutar de ella: LA SENDA.
Buah!!! Mooooolaaaaaa
ResponderEliminarSí señor! ahí estás tú. Suscribo todas y cada una de las letras que has escrito.
Me encantan este tipo de "divagaciones", llenan de verdadero mtb este blog.
Chapeau Admin!! ;)
No tengo palabras para describir lo que he sentido al leer esta divagación: Bravo admin, pocas veces se podrá expresar tan profundamente un sentimiento tan único y a la vez tan colectivo. Estoy contigo.
ResponderEliminarRiba Riba !!!!
Amén, Hermano.
ResponderEliminarBuenos días rots.
ResponderEliminarAlabado sea nuestro Admin.
Para el que todavía no sepa que es una senda, yo creo que ha quedado claro, sí señor.
Las sendas corren por mis venas y tengo un monazo que me roto vivo.
Rotemos pues!!!
ResponderEliminarP.D.: bon dia!.
Bon dia, sendacicladores.
ResponderEliminarPues en 5 minutos en el parque de la tahona!!!
ResponderEliminarZambu, no me digas eso que es jueves aún y esta semanita se está pasando muuuuy lenta. Agh!
ResponderEliminarP.D.: no aguanto más sin rotar, nenes!!
Ehhh! que estoy en el parque de la Tahona y aqui no hay nadie!!!!
ResponderEliminarNenes, la que nos espera el sábado!! Estoy ya ansioso por ver la convocatoria de nuestro secre, pq el anticipo que nos puso ayer me pone brutote...
ResponderEliminarEngrasen sus bicis, nenas... jejeje qué ganazas hay.
ResponderEliminarEl sábado promete, aunque yo de momento "ensete" una nueva tanda de antibióticos, qué ansia de sinusitis!
Abriré un nuevo hilo para el tema, pero el viernes que viene a las 20 horas, en la Casa de Cultura hay reunión para preparar la Manifestación de Alicante.
¿ habrá que lustrar la armadura?
ResponderEliminarbon día a tots
Lustrar la armadura? Te refieres para encarar salvajes trialeras o para enfrentarse a los chupatintas pro-decreto?
ResponderEliminarEn cualquiera de los dos casos, habrá que lustrarla, cosinet. ;)
Por cierto,Sr. secretari. está todavía vigente la rotada de esta tarde? Hay plan alternativo co el Dioni, por site interesa.
ResponderEliminar¡¡¡¡ ssseeeecccrreeeeeeeeee !!!!!!
ResponderEliminar¿ tas por ahí?
44000 visiticas ya!!!
ResponderEliminar¿ hay alguien ? :( :(
ResponderEliminarPor favor, sean considerados con el populus que trabaja mañana y tarde, y no nos restrieguen por la cara sus fabulosas rotadas ilegales vespertinas, que aquí hay gente encadenada a un lamentable horario laboral... snif, snif, me voy a llorar al aseo un rato......
ResponderEliminarQuè aseo ni qué leches!!! sin levantarse del puesto señores. No hay que provocar sospechas. ssshhiiitttoo
ResponderEliminarBere, queda con él. No sé si voy a poder acompañaros.
ResponderEliminarFale?
Dime hora y sitio, y el plan alternativo B ese que dices...
ResponderEliminarNenes, reservarsus pal sábado, joé!
ResponderEliminarY dejad ya el pu*o restriegue de rotada vespertina en horario laboral, coñe!