~ EL RETO (parte II) ~
Medio año atrás, terminábamos una rotada de las que crean afición en las Rabosendas, con la inigualable compañía de nuestros Tinker Berenguélez y Pacolo, y ya en Novelda nos desplazamos al Magre, que desde ese preciso día, y de la mano de los Nasíos, dejó de ser un modesto y currado campillo con algunas pasarelas y muchas ideas, a subir un nivel más, con nuevas rampas, peraltes, wallrides y trialeras que prometen diversión y técnica encima de la burra. Pero claro, "inaccesible" para el rotero. ¿Inaccesible?
Recuerdo llegar allí y ver el "parking" petao de coches y hasta un camión de Demetrio. Todo lleno de gente que se había pasado la mañana transformando el Magre a golpe de azada, rastrillo y tablones de madera y palets que viajaban sin cesar de un lado a otro. Con la vista desbordada me asombraba viendo la ilusión que compartían junto con Oscurín, verdadero dueño y promotor de la idea, una idea que comenzó vagamente allá por el verano de 2008 como consecuencia de la oscuridad que se apoderaba de algunos miembros de la penya y que meses atrás comenzó en la huerta de un servidor, junto a Pepako.
Nico me acompañó hacia la más alta de las rampas allí en el Magre, y cuando estuve encima de ella, mi cabeza tan sólo me devolvía una pregunta: "¿Cómo pueden estar tan locos? Esa rampa es bestial, si aterrizas mal ahí te matas..." Veía totalmente IMPOSIBLE hacer semejante salto con nuestras bicis... Y al cabo de 15 min. allí estaba el "testeador" de los Nasíos: mi primo David con su Commençal Supreme, llegando a toda leche y haciendo fácil lo difícil. Un salto limpio y perfecto. "Están locos estos romanos", me dije a mi mismo.
Apenas cinco minutos después, Pacolo "el Nómada" ya había sacabo su burra del coche y estaba ansioso pegando botes por las rampas del Magre como si fuera algo sencillo. Ver a esta gente que sabe controlar la bici es, sencillamente, una gozada.
Pasaban las semanas, y cada sábado nuestra cita ineludible con las piedras y el monte se hacía patente, pero sin darnos cuenta disminuíamos los kilómetros pero manteniendo el desnivel acumulado. Acostumbrábamos a nuestras piernas a ser más explosivas, nuestro sentido del equilibrio se iba agudizando, nuestros retos aumentaban, y surgió de boca de alguien el nombre ideal para tan excitante costumbre: ENGORILAMIENTO.
Esa parada en la trialera para analizar la trazada, ese Morro Gros que ya no tenía secretos para nosotros, esa Canteramen que a día de hoy se rinde a nuestros tacos, son fruto de la evolución que nos va transformando encima de la bici y nos hace disfrutar más de ella, pues vas consiguiendo "domarla" y haciendo que sea ella la que va por donde le dices, suave y mansa, al tiempo que la horquilla y el amortiguador se encargan de que tu estabilidad siga intacta. Y mientras todo esto ocurre, la adrenalina fluye haciéndote gritar de alegría mientras ves a tus compañeros bajando contigo. Una sensación indescriptible, sin duda, que se alarga incluso cuando vas rememorando esa trazada en la cervecita posterior, y más aún, cuando estás en el sofá o en la cama dispuesto a darte una merecida siesta después de haberte duchado y comido, viendo las fotos y endorfinando a chorretones...
Pero el cambio más drástico llegó a partir de algo que se comentaba y parecía más un mito que pura realidad: el Enduraid. Se decía que "hay un antes y un después del Enduraid". Pues bien, ese mito se rompió en mil pedazos y pasó a ser pura realidad. Al menos para mi. Ver a la gente cómo controlaba y tratar de imitarles (en todo lo que uno buenamente puede), nos hizo subir un escalón. Y si a eso le unimos la frase que quedó en mi mente grabada a fuego y que me ha servido de muchísimo, tenemos como resultado un mayor número de retos posibles y conseguidos. Pero ojo, retos con cabeza. Hay que saber hasta dónde puede uno llegar, eso nunca se debe olvidar...
La frase era (me la dijeron justo antes de tirarle por primera vez al Only Bikers): "si vas a tirarle, hazlo relajado, nunca con tensión. Si estás seguro de poder hacerlo no te va a pasar nada". No hay nada peor que tirarle a un salto con dudas, pues te harán tocar el freno en algún momento y entrar con poca velocidad, con el consecuente peligro de salir por orejas clavando la horquilla. Hace falta decisión.
Y hace unas semanas llegó un nuevo descubrimiento púramente rotero: la Losa y todo lo que la Mola da de sí. Desnivel, roca, trialeras "imposibles", zetas en la cantera y el reto añadido del último escalón que también antes parecía un mundo. Lo que hace meses no nos podíamos imaginar, a día de hoy es toda una realidad. Sí, hay un antes y un después de la Jaipalada y el Enduraid. Puedo dar fe de ello.
Lunes 11/05/09. Como no pude ir a llevar la bici a Guijarro, al terminar unos recados salí a dar una vuelta en busca de alguna nueva losa o trazada en nuestra Mola. Pensaba tomármelo con tranquilidad y hacer esas fotos que tanto me gustan con el sol que hay cuando cae la tarde, pero cuando llegué a la altura del Magre, decidí hacer el circuito que hemos hecho prácticamente todos los roteros (trialera + escaleras + pasarela + salto + salto final con recepción de madera). Una vez hecho volví a subir por el camino, pero algo me llamaba la atención... Era la rampa de los Nasíos. Escuché en boca de alguien que con nuestras bicis se puede hacer, y que la recepción es suave. Me acerqué, la contemplé y conforme pasaban los minutos la veía más y másfácil asequible. Finalmente, algo dentro de mí me dijo que podría hacerla. Saqué la cámara y la coloqué en el trípode. Volvía una y otra vez a mirar la rampa por todos los ángulos posibles. Me bajaba a la recepción y quité algunos pedrolos gordos "por si acaso". Tuve un conflicto personal entre mis "yo" partidarios y detractores reunidos en asamblea dentro de mi coco que duró 25 minutos de reloj, mientras analizaba detenidamente desde dónde tenía que salir y la velocidad aproximada que llevar, y si debía o no dar golpe de manillar.
Finalmente, apareció la famosa frase en mi mente, cogí la bici y subí hasta donde había acordado salir, puse el plato mediano (que es el grande en la Yeti), me relajé, respiré hondo y salí decidido. Llegué a la rampa e instintivamente eché el culo un poco hacia atrás manteniendo el manillar siempre recto y saboreé al máximo el instante en el que iba volando, hasta que aterricé sin problemas. E inmediatamente me llegó, justo antes de frenar, la pregunta de siempre: "¿Tanto miedo para esto?", con su correspondiente respuesta: "Si no tiene náaaaa!". Dejé la bici y la adrenalina comenzó a hacer su efecto: un subidonaco del 15, respiración agitada, corazón que se sale del pecho, gritaco del 15 que me solté estando allí más sólo que la una... Lo cierto es que no tiene nada pero siempre y cuando caigas bien, porque si lo haces mal, la leche es de cuidao. Eso sí, casco integral para la próxima. Y la horquilla ni siquiera hizo tope.
En definitiva, un reto más superado hacia mi larguííííísimo camino de doma de la Yeti. Pero ojo, siempre con el conocimiento y la prudencia de lado. Cuando no se ve, no se ve y punto.
Aquí va el montaje sobre el vídeo de "Er Sartu". Como siempre, IMPRESCINDIBLE enchufar los altavoces. Espero que os guste:
Recuerdo llegar allí y ver el "parking" petao de coches y hasta un camión de Demetrio. Todo lleno de gente que se había pasado la mañana transformando el Magre a golpe de azada, rastrillo y tablones de madera y palets que viajaban sin cesar de un lado a otro. Con la vista desbordada me asombraba viendo la ilusión que compartían junto con Oscurín, verdadero dueño y promotor de la idea, una idea que comenzó vagamente allá por el verano de 2008 como consecuencia de la oscuridad que se apoderaba de algunos miembros de la penya y que meses atrás comenzó en la huerta de un servidor, junto a Pepako.
Nico me acompañó hacia la más alta de las rampas allí en el Magre, y cuando estuve encima de ella, mi cabeza tan sólo me devolvía una pregunta: "¿Cómo pueden estar tan locos? Esa rampa es bestial, si aterrizas mal ahí te matas..." Veía totalmente IMPOSIBLE hacer semejante salto con nuestras bicis... Y al cabo de 15 min. allí estaba el "testeador" de los Nasíos: mi primo David con su Commençal Supreme, llegando a toda leche y haciendo fácil lo difícil. Un salto limpio y perfecto. "Están locos estos romanos", me dije a mi mismo.
Apenas cinco minutos después, Pacolo "el Nómada" ya había sacabo su burra del coche y estaba ansioso pegando botes por las rampas del Magre como si fuera algo sencillo. Ver a esta gente que sabe controlar la bici es, sencillamente, una gozada.
Pasaban las semanas, y cada sábado nuestra cita ineludible con las piedras y el monte se hacía patente, pero sin darnos cuenta disminuíamos los kilómetros pero manteniendo el desnivel acumulado. Acostumbrábamos a nuestras piernas a ser más explosivas, nuestro sentido del equilibrio se iba agudizando, nuestros retos aumentaban, y surgió de boca de alguien el nombre ideal para tan excitante costumbre: ENGORILAMIENTO.
Esa parada en la trialera para analizar la trazada, ese Morro Gros que ya no tenía secretos para nosotros, esa Canteramen que a día de hoy se rinde a nuestros tacos, son fruto de la evolución que nos va transformando encima de la bici y nos hace disfrutar más de ella, pues vas consiguiendo "domarla" y haciendo que sea ella la que va por donde le dices, suave y mansa, al tiempo que la horquilla y el amortiguador se encargan de que tu estabilidad siga intacta. Y mientras todo esto ocurre, la adrenalina fluye haciéndote gritar de alegría mientras ves a tus compañeros bajando contigo. Una sensación indescriptible, sin duda, que se alarga incluso cuando vas rememorando esa trazada en la cervecita posterior, y más aún, cuando estás en el sofá o en la cama dispuesto a darte una merecida siesta después de haberte duchado y comido, viendo las fotos y endorfinando a chorretones...
Pero el cambio más drástico llegó a partir de algo que se comentaba y parecía más un mito que pura realidad: el Enduraid. Se decía que "hay un antes y un después del Enduraid". Pues bien, ese mito se rompió en mil pedazos y pasó a ser pura realidad. Al menos para mi. Ver a la gente cómo controlaba y tratar de imitarles (en todo lo que uno buenamente puede), nos hizo subir un escalón. Y si a eso le unimos la frase que quedó en mi mente grabada a fuego y que me ha servido de muchísimo, tenemos como resultado un mayor número de retos posibles y conseguidos. Pero ojo, retos con cabeza. Hay que saber hasta dónde puede uno llegar, eso nunca se debe olvidar...
La frase era (me la dijeron justo antes de tirarle por primera vez al Only Bikers): "si vas a tirarle, hazlo relajado, nunca con tensión. Si estás seguro de poder hacerlo no te va a pasar nada". No hay nada peor que tirarle a un salto con dudas, pues te harán tocar el freno en algún momento y entrar con poca velocidad, con el consecuente peligro de salir por orejas clavando la horquilla. Hace falta decisión.
Y hace unas semanas llegó un nuevo descubrimiento púramente rotero: la Losa y todo lo que la Mola da de sí. Desnivel, roca, trialeras "imposibles", zetas en la cantera y el reto añadido del último escalón que también antes parecía un mundo. Lo que hace meses no nos podíamos imaginar, a día de hoy es toda una realidad. Sí, hay un antes y un después de la Jaipalada y el Enduraid. Puedo dar fe de ello.
Lunes 11/05/09. Como no pude ir a llevar la bici a Guijarro, al terminar unos recados salí a dar una vuelta en busca de alguna nueva losa o trazada en nuestra Mola. Pensaba tomármelo con tranquilidad y hacer esas fotos que tanto me gustan con el sol que hay cuando cae la tarde, pero cuando llegué a la altura del Magre, decidí hacer el circuito que hemos hecho prácticamente todos los roteros (trialera + escaleras + pasarela + salto + salto final con recepción de madera). Una vez hecho volví a subir por el camino, pero algo me llamaba la atención... Era la rampa de los Nasíos. Escuché en boca de alguien que con nuestras bicis se puede hacer, y que la recepción es suave. Me acerqué, la contemplé y conforme pasaban los minutos la veía más y más
Finalmente, apareció la famosa frase en mi mente, cogí la bici y subí hasta donde había acordado salir, puse el plato mediano (que es el grande en la Yeti), me relajé, respiré hondo y salí decidido. Llegué a la rampa e instintivamente eché el culo un poco hacia atrás manteniendo el manillar siempre recto y saboreé al máximo el instante en el que iba volando, hasta que aterricé sin problemas. E inmediatamente me llegó, justo antes de frenar, la pregunta de siempre: "¿Tanto miedo para esto?", con su correspondiente respuesta: "Si no tiene náaaaa!". Dejé la bici y la adrenalina comenzó a hacer su efecto: un subidonaco del 15, respiración agitada, corazón que se sale del pecho, gritaco del 15 que me solté estando allí más sólo que la una... Lo cierto es que no tiene nada pero siempre y cuando caigas bien, porque si lo haces mal, la leche es de cuidao. Eso sí, casco integral para la próxima. Y la horquilla ni siquiera hizo tope.
En definitiva, un reto más superado hacia mi larguííííísimo camino de doma de la Yeti. Pero ojo, siempre con el conocimiento y la prudencia de lado. Cuando no se ve, no se ve y punto.
Aquí va el montaje sobre el vídeo de "Er Sartu". Como siempre, IMPRESCINDIBLE enchufar los altavoces. Espero que os guste:
Entradas
Juer!!
ResponderEliminarJuer, buenísimo.
ResponderEliminarJosele engorilao!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Juas, juas
Me has dejao con la boca abierta pedassssso de cabrón... sorprendido me has....!!
ResponderEliminarEntrada perfecta en su explicación, contenido, sentimiento y ENGORILAMIENTO AH AH AHA HHA AHHA AH AH AAHA AH AHAHA AHA AHA AH!!!!!!
Estamos locos o que?? y eso?? no me lo esperaba para nada!!!
ResponderEliminarGRANDEEEEEE!!!!! Que saltaco!!
Jose, viendo el video y con lo que has comentado de que tu idea ir a hacerle una visita a la mola para descubrir algo nuevo me han entrado ganas de ir a mirar un par de cosas que tengo pendientes por alli. Asi que... a que hora sales hoy engoriliao??
Pos salto a las 7, pero me voy a cambiarle las pastillas de SCANIA que me pusieron y a que me ajusten el cambio de una pajolera vez.
ResponderEliminarPerdón, quería decir "salgo" en lugar de "salto", jejjeeje..
ResponderEliminarEso es un montaje.... :P
ResponderEliminar¡que grande! una entrada guapisima (joer con la pluma de los primicos), describes lo indescriptible ;-)
ResponderEliminarah! y enhorabuena por el reto conseguido, toma saltacooooo!!!!!
¡que viva el ENGORILEEEEE!!!!!
Apuntadme a la sección DARK ROTERS, ¿para cuando una camiseta engorilera??????
hace apenas un mes mirabas como nico saltaba eso y tu ni de lejos lo pensabas. ciertamente el enduraid ha hecho mella en vosotros
ResponderEliminar"engorilaos los quiere dios"
Qué razón llevas, Octavio! Quizá eso es lo que más me ha hecho pensar. ;)
ResponderEliminarEso eso Pacolo...camiseta gorilera ya!!!!!!
ResponderEliminarPalabra de Rot...
ResponderEliminarTe alabamos señor.
PD: que grande Josele!!!
José Luis: Háztelo ver eso.
ResponderEliminarNo teneis solución. Me paso al rali de plato grande fijo.
Quien os ha visto y quien os ve!!
ResponderEliminarjamematen!
Yo me cambio de penya, aquí no doy la talla...
ResponderEliminarJose, una Divagación tremenda!!!! ;)
Buenos dias!!!.
ResponderEliminarVicente, si eso es un montaje!!!, je, je, je....
Bueno, supongo que al final la rotada es a la Silla del Cid como hemos comentado, no?. Que estamos a jueves, y tenemos la casa sin barrer....
A guayNord....
ResponderEliminarJoder señores que ganas tengo de rotar....por dios!!!!
ResponderEliminarCómo lo tienes este sábado, Grafo?
ResponderEliminarEl grafo seguro que hasta el ultimo fin de semana de mayo no puede rotar...pero temblad que llega junio...y apenas hay bodas..ja ja ja..quitando los sabado claro..y la boda de nuestro Juanaco...!!!!
ResponderEliminarPero Javi, ese sabado de la boda, es rotable cien por cien!!!!, je, je, je....
ResponderEliminarTú no sé, pero nosotros nos espolsaremos una losa rapidita a tu salud por lo menos, jejejeje.
ResponderEliminarSi vale el sabado de la boda de Juanaco intento el sartu!!!!! por la mañana vale Juan?
ResponderEliminarPor supuesto!!!!. Mientras tu (Javi) y yo estemos luego para la tarde de una pieza, me va bien!!!!, juas, juas, juas.... Por la cuenta que nos trae....
ResponderEliminarClaro, claro, esa mañana tiene que caer una Baja'l y un mega almuerzamen en bareto!!!
ResponderEliminarLo primero no se, pero lo segundo seguro que si!!!.
ResponderEliminarPues tú ves pillando sitio, que yo roto. :P
ResponderEliminar